Han pasado más de 250 días desde el coronavirus y el teléfono y el ordenador están echando humo de tanta videollamada por culpa del teletrabajo. Seguro que muchos de vosotros estáis fatigados de tantas videoconferencias y de utilizar la cámara web cada vez que os acerquéis al ordenador o móvil, ya sea por teletrabajo o para hablar con tus amigos o familiares. Ten en cuenta que esto no acaba con la pandemia del COVID-19, el teletrabajo junto con la videoconferencia se va a quedar mucho tiempo.


Las videoconferencias desempeñarán un papel importante cada vez mayor, ya sea para la escuela, teletrabajo, atención médica y comunicación con nuestros seres queridos. La pandemia empujó a la tecnología de la información a crear nuevos entornos, como la del teletrabajo, y a su vez los usuarios de la tecnología de la información tuvieron que desarrollar o aprender esa forma de vida, convirtiéndose en usuarios avanzados de las aplicaciones de Zoom, Facetime o Google Meet en tan solo cuestión de semanas.

Oded Gal (director de productos de Zoom): “Lo que sucedió con una pandemia es interesante… Todas las personas que se resistieron a usar la tecnología se vieron obligadas a usarla.” Sobre todo, por teletrabajo.

¿Qué tienen pensado Apple, Zoom, Facebook, Microsoft, Google para actualizar el modo de realizar videoconferencias?

Tras el inicio de la pandemia, toda aquella empresa que disponía de alguna plataforma de videoconferencia, ha visto que el número de usuarios nuevos ha incrementado de una forma considerable, así como su uso total. La cantidad de usuarios nuevos, muchos de los cuales era por teletrabajo, hacía que las plataformas de videoconferencias tuvieran deficiencias. La búsqueda de la mejor aplicación podría agobiarte tanto que la mejor opción es la primera que viste.

Un poco de historia

La videoconferencia no empezó para el teletrabajo, era una comunicación social para poder comunicarnos con personas que estaban lejos de nuestro entorno. La posibilidad de la comunicación virtual solo lleva en nuestras vidas apenas dos décadas y fue lanzado por Skype en el 2003. Los inicios fueron duros, ya que el video no era de muy buena calidad o el audio se entrecortaba y con estas deficiencias el teletrabajo no pudo desarrollarse aún, pero la comunicación social de índole afectivo sí.

Después de varios años, las deficiencias aún persistían, aunque la tecnología sigue avanzando y el video era de una calidad mejor, siempre había frustración ya sea por la conexión (que tampoco era muy buena) o por el audio. Finalmente, siempre utilizabas el teléfono para llamar y dejarte unos cuantos euros en llamadas internacionales para poder hablar con esa persona.

Según expertos psicólogos, después de la novena videollamada en el teletrabajo carga al trabajador de una sensación de fatiga y es que dicen que la tecnología sobrecarga su cerebro. Explicado un poco mejor, el proceso de fatiga llega cuando el receptor ve la imagen en pantalla, a veces borrosa y con retraso de milisegundos del sonido y la imagen, es en ese momento cuando tu mente divide la atención entre lo que está diciendo el emisor con lo que está sucediendo en pantalla, imaginando a su vez las señales no verbales que se pueden intuir. El teletrabajo puede agotar tu mente y despejarla mirando por la ventana o al horizonte podrás notar mejoría.

Otro estudio dice que en realidad no es una fatiga, sino que es una depresión por el estado de pandemia que estamos pasando.

Jason Farman: “Continuamente se nos presenta la promesa de la conexión instantánea que nos conecta sin problemas con las personas que amamos y las personas con las que trabajamos, y eso es una ficción… Creo que hemos oído esa promesa durante más de 100 años”

Hace unos 100 años el teléfono se instaló en nuestras vidas como una herramienta comercial, haciéndose popular para hablar con los amigos. Muchas personas escépticas en su momento pensaron que los teléfonos cortaban la confianza social, ya que mantener una conversación presencial era más sustancial que la del teléfono. Por ello Bell Labs preparó rápidamente una solución en la década de 1920, una llamada telefónica y una imagen televisada.

Unos inicios que ya veía el futuro que se avecinaba, las videoconferencias, el teletrabajo… Computadoras y teléfonos conectados a Internet junto con la llegada de banda ancha se convirtió en una forma de vida habitual y la ausencia de ella era un vacío. Los portátiles con wifi y cámaras integradas se convertían en un dispositivo para videoconferencias y teletrabajo. En el 2011 llegó el iPhone 4 que disponía de una cámara frontal con un software que revolucionaba la era del móvil. FaceTime junto con el 3G haría del iPhone la herramienta perfecta para las videollamadas, aunque una quinta parte de los estadounidenses no habían probado esa herramienta, ni siquiera para el teletrabajo.

Incluso antes de la pandemia muchos de vosotros no habéis utilizado la aplicación, seguro que en esta pandemia la habéis utilizado más que nunca. Según un estudio de un grupo de investigadores de Yale, descubrió que en realidad podemos comprender mejor las emociones a través de la voz que del video.

El futuro presente

Los dispositivos de videollamada para teletrabajo o para conectar con sus familiares o seres queridos tiene una actualización y puede que ya esté en nuestras manos.

De hecho, Facebook está vendiendo un dispositivo que convierte tu televisión en un dispositivo de video chat, por ejemplo, para el teletrabajo, con un precio que ronda los 125€ llamado PortalTV de Facebook. La compañía ha visto que muchas plataformas de videoconferencias han aumentado en usuarios y Facebook no quiere ser menos.

Google ha incluido en su catálogo un dispositivo para las conferencias virtuales. Llamado originalmente Home Hub, y ahora Google Nest Hub Max, el dispositivo es una Tablet de 10 pulgadas anclada a un pedestal. La cual podrás realizar videollamadas para el teletrabajo desde la aplicación Duo.

Zoom quiere competir y actualizarse para adaptarse aún más a los usuarios, y quiere centrarse en los usuarios de la educación y del teletrabajo. Zoom se asoció con DTEN para crear el dispositivo llamado DTEN ME y creando una nueva categoría “Zoom for Home”. En la categoría permite a cualquier persona imprentar un dispositivo de colaboración para el teletrabajo o para la educación virtual. DTEN ya está disponible en EEUU con un precio de 500€ al cambio. Es una especie de tablets de 27 pulgadas en Full HD.

Las compañías ya están mirando en un futuro que podría realizarse en un presente inmediato, la holografía. Pasamos de un mundo virtual a una imagen en tres dimensiones. Aunque muchas empresas nos han mostrado muchos ejemplos como este:

LTEN. Holograma de la conferencia del 2018

Los grandes cantantes ya lo están introduciendo en sus conciertos:

Holograma de Whitney Houston en su Tour de Dublín

Y la llegada de las videoconferencias para el teletrabajo:

Mini máquina de hologramas para realizar videollamadas

En GOWtech pone a su disposición cualquier aplicación para el teletrabajo tanto para grandes empresas como para medianas y pequeñas empresas, pero si quieren esta pequeña máquina para el teletrabajo tendreis que esperar un poco más.