En los tiempos que corren cada vez son mucho más variadas las formas en las que un individuo puede adquirir un producto o servicio por medios distintos a los tradicionales. Tras la revolución del concepto de streaming, están surgiendo nuevas tendencias de marketing digital, una de ellas es la compra a través de la televisión.
Este fenómeno ha recibido el nombre de shoppable TV y lleva muchos años desarrollándose. Sin embargo, los expertos aseguran que ahora es el momento en el que los consumidores están preparados para adoptarlo.
Actualmente, los hábitos de compra de los consumidores son mucho más maduros y están surgiendo nuevas formas de adquirir productos o servicios adaptados a estos. El mundo de los productos al alcance de un clic se está extendiendo gracias a la shoppable TV.
La publicidad digital está en continuo cambio y surgen nuevos formatos y posibilidades que facilitan la tarea de compra de los consumidores. Las nuevas opciones combinan diferentes canales para ofrecer experiencias flexibles e individualizadas para cada usuario.
Así, en GOWtech afirmamos que el modelo tradicional de publicidad en televisión ya está prácticamente extinguido, y los bloques de anuncios son ya cosa del pasado. Gracias al streaming, los hábitos de consumo de televisión de los individuos han cambiado radicalmente. Los usuarios prefieren consumir el contenido que ellos prefieren y que está más personalizado a sus gustos, además, pueden tener al lado el móvil o la Tablet para facilitar el proceso de compra.
Actualmente las plataformas de streaming como Netflix, Amazon Prime Video, HBO o Disney Plus, se han adueñado de las televisiones en prácticamente todos los hogares y se han convertido en una nueva forma de consumir televisión y de entretener a los usuarios. Los anunciantes pensaron que poner un comercial en medio de una serie o película no era la mejor opción, por ello, la opción más adecuada era utilizar el product placement. A través de este formato los productos o servicios aparecerían de una forma sutil y sin molestar al espectador mientras ve su serie favorita.
El product placement ha tenido un papel fundamental en el desarrollo del shoppable TV. Con este modelo, el producto ha pasado a formar parte de la trama, y el espectador responde a este estímulo de manera positiva. Los avances de la publicidad en televisión han hecho que los productos que aparecen en una escena concreta se puedan comprar con tan sólo un clic por parte del espectador que está delante de la pantalla. Ya que, normalmente los individuos siempre tienen su móvil al lado para buscar información sobre lo que están viendo.
Además, el shoppable TV funciona de una forma muy sencilla y cómoda. El usuario sólo tiene que acceder a su cámara y escanear el código QR que aparece en pantalla. Una vez escaneado el código le redireccionará a una página web en la que debe ingresar como nuevo usuario. Y ya estaría todo listo, el usuario podrá realizar la compra en la web o guardar su producto favorito en el carrito de compra para más tarde.
Uno de los ejemplos de plataformas que están usando este nuevo concepto es el gigante del e-commerce (Amazon Prime Video), concretamente en un programa llamado Making the Cut. En este programa un grupo de diseñadores compiten para crear la mejor prenda de vestir. Al final las prendas ganadoras pueden ser adquiridas por los espectadores y de hecho se agotan en un abrir y cerrar de ojos.
En definitiva, el shoppable TV es un nuevo concepto que se ha convertido en algo más que una simple forma de adquirir los productos que el cliente desea, es una nueva experiencia de compra para los usuarios. El shoppable TV es un claro ejemplo de que para vender se debe evolucionar continuamente y buscar nuevos modos de enfocarse en el problema y conseguir una solución a las necesidades del cliente.
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